Propósito

Abrirme a la conciencia, imaginarme lúcida. Saber que el verbo es el mundo y morir para la realidad de las cosas, para su parloteo. Escuchar el canto de los pájaros en mi cabeza, entender su mensaje.

Como aquél que conocía el idioma de los lobos.

No me falta mucho para lograrlo. Sólo tengo que hacer los últimos ajustes, los retoques y afinamientos finales.

Mi aprendizaje ha sido largo y tortuoso, pero finalmente ha llegado el momento de declararme lista, terminada. Ahora soy una mujer hecha y puedo hacer uso de mi destreza, de mi libre albedrío.